Cuando la vida tú ya terminaste,
tu sangre brota en último latido,
tranquilo vas, mi Cristo dolorido,
a todos redimiste y perdonaste.
El alma se estremece al contemplarte
por Arfe y por Molviedro, tan herido,
viendo todo tu cuerpo escarnecido,
porque por mí, Señor, tú te entregaste
Al exhalar el último suspiro
al Creador ya tu alma has entregado,
¡esperanzado estoy cuando te miro!
Y tu vida por mí ya has consumado
con el último aliento de un respiro.
¡Perdóname, Señor, pues he pecado!
Comentado por Antonio Barrera Repullo en noviembre 18, 2010 a 4:11pm
precioso, Pepe, de verdad que ha quedado impresionante, espero seguir leyendo tus poemas aqui en esta pagina, y que te voy a decir del Calvario, si ya esta dicho todo, todas las madrugadas del Viernes Santo, con su impresionante paso, va dejando un reguero de amor para poder llegar a su Madre la Virgen de la Presentacion, que pronto podremos verla en Besamanos. un saludo desde Triana
Dely Fernández de la Fuente Comentado por Dely Fernández de la Fuente en noviembre 3, 2010 a 12:52pm
Precioso poema y mucha razón tienen todos los comentarios que he leido. Un saludo
Marta San Andrés Comentado por Marta San Andrés en agosto 30, 2009 a 1:09pm
Enhorabuena. Qué arte tienes para con esto.
Un abrazo.
Gema Hiniesta Comentado por Gema Hiniesta en agosto 28, 2009 a 1:36pm
Que bonito Pepe!!!!quien es su autor?? Un saludo :D
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